“Las despedidas no tienen por qué ser un drama, pueden ser una fiesta”, expresan los integrantes de Quilapayún en el adiós a uno de sus integrantes más representativos. Carlos Quezada, voz de la banda, será homenajeado en el concierto Chile-Francia, despedida que quedará como un hito en la historia de grandes logros artísticos y poéticos de Quilapayún. Este espectáculo, se presentará el 31 de marzo en el Teatro Oriente, 1 de abril Teatro de Valparaíso, el 8 de abril en el Teatro Concepción. Entradas disponibles en PuntoTicket.
En estos conciertos, la agrupación ícono del Nuevo Canto Chileno, despedirá a quien se convirtiera en uno de sus miembros estrella, desde su incorporación en 1966. “Despedir a Carlos Quezada, es un momento de alegría, porque es la celebración de 57 años de canto, de éxitos, conciertos, giras, discos y de todo aquello que hace la vida de un grupo de primera importancia en la escena latinoamericana”, expresa Eduardo Carrasco, fundador y director artístico de Quilapayún.
El nombre de este espectáculo, tiene relación a la marcada presencia de Francia en la carrera de la banda, desde su exilio forzado durante la dictadura de Augusto Pinochet. En esta línea, Carrasco agrega que “esa huella de canciones y poemas que han dejado en el Quilapayún esos años en Chile y en Francia son los que recordaremos en estos conciertos históricos poniendo énfasis en la participación protagónica de Carlos Quezada, voz que marcó siempre la trayectoria del grupo con su expresividad y su timbre inigualable que ahora se despide para siempre de los escenarios”.
Carlos Quezada, llegó a Quilapayún cuando Víctor Jara todavía era su director artístico y se retira en tiempos donde la agrupación sigue en plena vigencia. Han celebrado sus 50 años de historia con conciertos en Chile y Europa, su feat. con Pablo Chill-E supera las 2 millones de reproducciones, participaron en Lollapalooza Chile 2022 y sorprendieron con la Cantata Santa María con paridad de género, que por dos temporadas se ha presentado con absoluto éxito.
“Hay que saber llegar y hay que saber partir. Las dos cosas requieren de una sabiduría de la que Carlos ha dado pruebas. No hay por qué eternizar los procesos y hay que saber en qué momento dejar tu lugar a los que vienen”, señala Eduardo Carrasco.
De este modo, añade que “este concierto será un recuerdo de los grandes momentos por los que ha pasado el grupo en sus 58 años de existencia, con las canciones que dejaron una huella y las que hoy día se están abriendo paso para ser mañana clásicos de la nueva era. Viviremos juntos el recuerdo y la esperanza, el día y la noche, la luz y la sombra, y todo lo que ha marcado la existencia de una agrupación que grabó con su sello la historia de la música chilena”.