Las Infecciones de transmisión sexual, ITS, son un problema de salud pública en personas en edad fértil, el cual ha ido en aumento durante los últimos años. Se estima que cada año hay un 63% de casos nuevos solo de VIH en nuestro país.
Las ITS se manifiestan clínicamente en distintas partes del cuerpo, principalmente en los genitales. Dependiendo del tipo de microorganismo que cause la infección, pueden generar verrugas, secreciones purulentas, úlceras dolorosas, entre otras.
El estado ha implementado diversas campañas relacionadas a la prevención, uso de preservativo, realización de test rápido, entre otros, sin embargo, no se ha logrado detener el ascenso de estas infecciones.
Si se mantiene el mismo compartimiento social, las tendencias demográficas y migratorias, la población expuesta a infecciones de transmisión sexual seguirá aumentando considerablemente, generando a corto plazo una alta carga de morbilidad en Chile y en el mundo, por lo tanto, es fundamental que como sociedad avancemos en la educación en salud sexual, salud reproductiva y en el autocuidado para la prevención de las ITS.
Bastante se ha hablado de que los nuevos locos años 20 se darían posterior a la pandemia, en donde se vería reflejado el desenfreno sexual y económico producto de los años de confinamiento. Por lo tanto, resulta mayormente importante la utilización de preservativo durante este tiempo, sobre todo ahora que se acercan las vacaciones de verano, época de esparcimiento y distención en donde se dan las instancias para compartir y conocer gente nueva.
El preservativo es un medio confiable para protegerse de las ITS durante las relaciones sexuales. Actualmente, existe condón de pene y de vagina, ambos igualmente de efectivos para la prevención de estas infecciones. Su correcto uso reduce considerablemente la probabilidad de contraer una ITS y, además, posee una efectividad del 98% para prevenir embarazos.
Una investigación realizada el año 2019 reveló que solo el 14% de los chilenos utiliza preservativo durante las relaciones sexuales y que más del 10% no lo utiliza nunca.
Durante las vacaciones se incrementa el consumo de alcohol y drogas recreativas, las cuales llevan a situaciones más riesgosas, por lo tanto, es de suma importancia el uso de preservativo para evitar contraer una ITS.
En el sistema público chileno contamos con un policlínico de ITS disponible en los hospitales de alta complejidad, llamado CAISS (centro de atención integral en salud sexual) o UNACESS (Unidad de atención y control en salud sexual). Estos centros de atención secundaria brindan asistencia confidencial y de calidad a todas/os las/os usuarias/os que presentan alguna ITS o que desean pesquisar alguna. Si bien la atención en estos aspectos debe ser otorgada primeramente en la atención primaria de salud (CESFAM), de igual forma las/os usuarias/os pueden solicitar hora en CAISS o UNACESS de manera independiente.
Es fundamental que como sociedad contribuyamos a evitar la propagación de las ITS que cada día son más frecuentes a nivel mundial. Existen distintos lugares donde consultar ante la sospecha y la recomendación es que como adultos responsables nos eduquemos para poder identificar los signos clínicos y las manifestaciones de estos cuadros infecciosos para luego realizar las consultar correspondientes con la/el profesional matrona/ón.
Romina Bustos Águila.
Matrona Especialista en Ginecología.
Académica Obstetricia
Universidad Andrés Bello